MONS. RAFAEL COB INICIA EL AÑO JUBILAR 2025 CON SOLEMNE APERTURA
Mons. Rafael Cob García, obispo vicario apostólico de Puyo, presidió este domingo la ceremonia de apertura de las puertas de la Catedral, dando inicio al Año Jubilar 2025 bajo el lema “Peregrinos de esperanza”. La jornada comenzó con una procesión desde el centro de formación Intipungo hasta la sede episcopal, congregando a cientos de fieles.
La procesión, encabezada por el obispo, contó con la participación de sacerdotes, misioneros, monaguillos y miembros de grupos apostólicos, quienes llenaron la Catedral para el acto litúrgico. Este evento se replicó simultáneamente en diferentes partes del mundo, siguiendo el ejemplo del Vaticano, donde el Papa Francisco lideró la apertura del Año Santo Jubilar.
El Papa ha designado el 2025 como un tiempo especial de conversión, destacando los sacramentos de reconciliación y la Eucaristía como pilares fundamentales. Durante la ceremonia en Puyo, Mons. Cob García enfatizó que este es un periodo para caminar en la fe, inspirado en figuras bíblicas como Abraham y Jesús. “La puerta santa nos recuerda las palabras del Evangelio de San Juan: ‘Yo soy la puerta’. Es un llamado al encuentro, a la paz y a la conversión”, señaló el obispo.
En su homilía, el prelado destacó la importancia de las familias como núcleo de esperanza para un mundo mejor. Sin embargo, expresó preocupación por los desafíos que enfrentan en la actualidad, señalando la falta de espacios para el amor, el diálogo y la escucha. Instó a los padres a prestar más atención a sus hijos y a imitar el ejemplo de María y José, quienes buscaron incansablemente a su hijo Jesús.
Mons. Cob García también lamentó los altos índices de violencia intrafamiliar en la provincia de Pastaza y exhortó a las familias a alimentar su vida espiritual a través de la fe y la oración. Concluyó su mensaje pidiendo a los fieles no abandonar a los padres ancianos, recordando la importancia del cuidado y respeto hacia ellos.
La apertura del Año Jubilar marca el inicio de un tiempo de reflexión y esperanza para la comunidad católica de Puyo y el mundo.