PRESIDENTA DEL PATRONATO CONMOVIÓ AL AUDITORIO

La nueva presidenta del patronato Provincial de Amparo Social de Pastaza María Cristina Acuña, pronunció un discurso cargado de emociones que conmovió a los asistentes al acto de posesión de las autoridades del Gobierno Provincial, el domingo 14 de mayo en el Coliseo de Puyo.
MariCris, haciendo pausas para controlar el llanto, recordó a su Mamácita, Rosario Vaca, en este Día de la Madre, el vigésimo año de su ausencia; pero expresó la alegría porque le acompañan su querida abuelita, su padre, Edgar Acuña, a quien dijo deberle todo lo que ella es. Y subrayó su gratitud a la vida por su esposo André Granda y sus hijas Matilda y Felicia, y toda la familia que se ha ganado al casarse con él.
A cada pausa sonaban los aplausos y las pupilas humedecidas de los asistentes, fijas en la oradora, que mostraba la esencia humana de una joven sicóloga que en su corto tiempo de trabajo se había sensibilizado con las necesidades especialmente de los niños de las comunidades más alejadas. Por lo que invitó a todos a soñar con los anhelos de cambio que todos tenemos. Con un Patronato Provincial que responda a las verdaderas necesidades de la provincia, especialmente de los sectores vulnerables, de manera abierta y humana, con igualdad de oportunidades para todos.
Finalmente, habló de la Eucaristía en la Catedral y la bendición del Padre Servilio Robles, ella sintió que le acompañaba su Madre y más aún al finalizar la Misa, se coreaba la canción Santa María del camino, le pareció escuchar cantando a su Mamacita. Y al escuchar la estrofa “Aunque te digan algunos que nada puede cambiar, lucha por un mundo nuevo, lucha por la verdad”, se la dedicó a su marido André, el Prefecto.
Aunque, los gobernantes tradicionales han usado todos los recursos para conquistar la simpatía del pueblo, las palabras de la nueva Presidenta del Patronato reflejan un matiz veraz y de rectas intensiones, desde la sinceridad para contar la vida personal y que esta alta dignidad va a ser para servir a todos, especialmente a los sectores más vulnerables.
“Y ojalá que nunca más vuelva la arrogancia y la prepotencia al Patronato”, me susurró un amigo que pidió no ser identificado. Hehl

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